EXCURSIÓN DE FIN DE CURSO DEL ARCIPRESTAZGO

   

Estamos en el Año de la Fe decretado por el papa Benedicto XVI, un periodo de reflexión, para dar respuesta a la creciente secularización. Con este motivo la excursión de fin de curso del Arciprestazgo se realiza este año al Seminario de Corbán y la Catedral de Santander, donde se ha realizado un acto en honor  de los Santo Mártires, patronos de Santander, y posteriormente una misa presidida por el señor Obispo y contando también con peregrinos del arciprestazgo de la Virgen de la Barquera.

El autobús salió de Potes a las nueve de la mañana, para llevar a 50 peregrinos a Corbán, donde contando con Don Elías y Don Ricardo Ruiz, se hizo una reflexión sobre los laicos en Liébana y Peñarrubia. Primero nos reunimos por grupos contestando a una serie de preguntas, sobre nuestro papael en la iglesia, la participación, el Consejo Pastoral, la formación y propuestas de mejora. Mientras tanto Don Elías enseñó el Seminario a los niños y niñas que viajaron. Después se pusieron en coún las conclusiones que apuntó un secretario de cada grupo. Destacaron las propuestas que realizaron los jóvenes presentes, y que formaron grupo con D. Ricardo.

Después la comida y a las tres se partió hacia la catedral de Santander.
  espués se fue en procesión hasta  la iglesia principal de la Catedral.

La misa dirigida por Don Vicente Jiménez Zamora estuvo concelebrada por sacerdotes de los dos Arciprestazgos, entre ellos Don Elías y Don Benito, colaboraron en la celebración los niños Alonso y Alfonso y también Jose que se encargó del incienso.. Don Elías fue el solista en todos los cantos y los jóvenes del Arciprestazgo, Elena, Ana, Nestor, Carlos y Juan Manuel leyeron las preces.
Hoy se celebraba la fiesta de la Ascensión relatada en el libro de los Hechos de los Apóstoles.
Don Vicente habló en la homilía de que la Ascensión supone un acto final de gloria en la vida del Señor, una primicia para nuestra vida, y el inicio de la la Iglesia, una iglesia que debe evitat el narcisismo y cerrarse en si misma .

Se terminó la celebración con un recuerdo a la Virgen María, cantando el  Reina del Cielo en latín, para después subir de nuevo el autobús y regresar a Potes.